viernes, 18 de septiembre de 2015

El laberinto


La desilusión volvía a acechar su alma. De pronto todo a su al rededor se desmoronaba. No había salida, no había escapatoria, su vida era un laberinto. La desilusión, el desconsuelo, la desesperación habían invadido su alma. Se sentía tan sola en su mundo... su vida había dado un revés, pero no sabía como afrontarlo. Tal vez era la oportunidad para levantar vuelo, y concretar su misión en esta vida. Pero... ¿cómo?. Por donde comenzar.... podía leer el mensaje que el universo le estaba dando, pero no lograba encontrar la manera de llevarlo a cabo. Sabía la meta, podía verla, pero no así el camino. Entendía que tenía que abandonar toda esa serie de sentimientos que la invadían, pero no podía. Sentimientos que la habían acompañado por mucho tiempo volvían a aparecer, sentimientos que tenía guardados, muy bien guardados en su corazón, recuerdos de vidas pasadas, habían resurgido con una fuerza adolescente. Se estaban comunicando con ella a través de lo onírico, nadie le creería. Podía ver con claridad los hechos antes de que sucedieran, como nunca antes lo había hecho. Se preguntaba si estaría despertando su llama gemela. A esta alma la angustiaba el sentirse con las manos atadas, no podía hacer nada. No podía dar su ayuda en el plano físico. Se interrogaba sobre el porque de tanta información, si no la buscaba, llegaba hasta ella durante el sueño de cada noche...